Históricamente incorrecto: para acabar con el pasado único.
Una joven editorial española se estrena con varios títulos muy sugerentes. Históricamente incorrecto. Para acabar con el pasado único, ya ha impactado en Francia. ¿Sucederá lo mismo en España?
Una joven editorial.
Ciudadela Libros ha iniciado una apasionante aventura en el difícil y complejo mundo de la edición en papel impreso. Presenta, en esta ocasión, un extraordinario libro escrito por el francés Jean Sévillia: Históricamente incorrecto. Para acabar con el pasado único (Ciudadela Libros, Madrid, 2005, 400 páginas).
El autor es periodista y crítico literario, trabajando como redactor jefe adjunto en Le Figaro Magazine. Aunque autor de varios libros, el que aquí comentamos, junto a su Le terrorisme intellectual de 1945 à nos tours (Ed. Perrin, París, 2000), han abierto en el país vecino un debate en torno a la dictadura -de perspectiva totalitaria- del pensamiento autodenominado progresista que se traduce en la expresión “políticamente correcto”, universalizada por obra de la izquierda intelectual, política y mediática.
¿Terrorismo intelectual?
Y no podía ser de otra manera. Compruébenlo con la lectura de las siguientes líneas procedentes de los primeros párrafos del editado en 2000: «En París desde hace cincuenta años, algunas decenas de hombres dan el tono. Discuten en antena. Publican artículos. Escriben libros. Enseñan en las cátedras. Intervienen en los coloquios. Firman peticiones. Comen juntos…En 1945 afirmaban que la URSS era un paraíso y redactaban poemas a la gloria de Stalin. En 1960 pretendían que la descolonización resolvería milagrosamente los problemas de los pueblos de ultramar. En 1965 saludaron la justa lucha de Fidel Castro, Ho-Chi-Min y Mao. En 1968 proclamaban que la felicidad nacería de la supresión de cualquier tipo de coacción. En 1975 celebraron la toma del poder por Pol Pot en Camboya. En 1981 creyeron abandonar la noche para entrar en la luz. En 1985 sostenían que Francia debía eliminar sus fronteras con la finalidad de acoger a los desventurados del mundo entero. En 1992 aseguraban que el estado nación estaba acabado y que la Europa de Maastricht abría una nueva era en la historia de la humanidad. En 1999 afirmaban que la familia y la moral eran conceptos pasados. Otros espíritus en esos mismos momentos, sabían que Stalin, Mao o Pol Pot dirigían regímenes criminales. Subrayaban que el mito de la ruptura revolucionaria no había engendrado más que catástrofes. Recordaban que las naciones, las tradiciones, las culturas, las religiones, no pueden desaparecer de un plumazo. Pero contra los refractarios, durante cincuenta años, el microcosmos parisino ha puesto en movimiento un mecanismo (…) el terrorismo intelectual (…) es un sistema totalitario (…) hipócrita insidioso. Pretende quitar la palabra al contradictor, convertirlo en una bestia que debe ser abatida (…) sin que corra la sangre: únicamente dejando resonar las palabras, las palabras de la buena conciencia. Las palabras de las grandes conciencias. Las palabras que matan…»
Con este nuevo texto, el autor, de alguna manera, sigue la estela marcada por el lamentablemente desaparecido hace unos pocos años Jean Dumont y su extraordinario La Iglesia ante el reto de la Historia (Ediciones Encuentro, Madrid, 1987), no en vano tratan algunos episodios comunes: la cruzada contra los albigenses, leyendas negras, la Inquisición, las guerras de religión, la acción de España en América… Así, Sévillia denuncia, de manera documentada y razonada, los grandes errores que la traslación, a la historiografía, de los tópicos de lo “políticamente correcto” ha provocada en la comprensión del pasado y en la interpretación de la misma realidad.
“Políticamente correcto”.
Pero ¿existe también lo “históricamente correcto”? Evidentemente. Al igual que se ha impuesto un “pensamiento político políticamente correcto”, un discurso sociológico dominante, un intento frustrado de ética universal desgajado de cualquier raíz trascendente, una sexualidad supuestamente liberadora, un disfrute masificado del ocio homologado y consumista… la historia se ha contaminado, así, por unos prejuicios que olvidan factores esenciales de la realidad pasada y presente: el valor de las mentalidad, la fuerza de los acontecimientos, el poder de los valores, el peso de la tradición cristiana…
Lo “políticamente correcto”, posteriormente, se reelabora en versión “vulgata” para su difusión masiva a través de los “mass-media” y la escuela estatalista; de modo que los planes de estudios oficiales son vitales para su implantación universal.
Si desde cierta contestataria, anarcoide y antiglobalizadora, izquierda, se habla de “romper el pensamiento único”, postura también asumida, aunque desde otros presupuestos muy distintos por ciertas derechas, Jean Sévillia ha asumido, conscientemente, el mismo propósito en el plano histórico, por lo que se atreve a cuestionar los dogmas aceptados masivamente; unos tópicos, ciertamente, que carecen de base científica.
Las propuestas del libro son apasionantes. Por ello, y para provocar el “apetito” del lector, nos tomaremos la libertad de reproducir su índice; de modo que, una vez terminen de leerlo, ciertamente, no podrán menos que sentirse empujados a conocer todos sus contenidos.
Índice del libro.
Veámoslo.
1. El feudalismo: la Edad Media redescubierta; el orden feudal: un estado transitorio; Francia, obra del Estado de los Capetos.
2. Las cruzadas: una respuesta a la expansión militar del islam; la primera cruzada: un arrebato de fe; las ocho cruzadas: la buena simiente y la cizaña; una intolerancia compartida.
3. Los cátaros y la Inquisición medieval: los cátaros, una secta peligrosa; la herejía: mal social, mal religioso; la cruzada contra los albigenses: todo salvo un conflicto Norte-Sur; la Inquisición: una justicia aprobada por la opinión pública.
4. La España de los Reyes Católicos: la Inquisición de España, una historia... española; los inquisidores: jueces equitativos; los Reyes Católicos no son antisemitas; Al-Andalus: el mito de la tolerancia musulmana; la leyenda negra de la América española.
5. Las guerras de Religión: de Lutero a Calvino, la ruptura con Roma; Francia arruinada por ocho guerras de Religión; Hugonotes y miembros de la Liga: los partidos contra Francia; el edicto de Nantes: coexistir en la intolerancia; la revocación del edicto de Nantes, fin de la excepción francesa; la intolerancia de los países protestantes.
6. El Antiguo Régimen: la monarquía de los Capetos, un poder moderado; servir al Estado: un mecanismo de ascenso social; cuando los privilegiados hacen fracasar la revolución real.
7. La Ilustración y la tolerancia: la Enciclopedia: una revolución intelectual; la tolerancia de los filósofos es selectiva; el racismo de la Ilustración; Protestantes y judíos: el pragmatismo real.
8. La Revolución y el Terror: 1789-1799: diez años de violencia; 1789: inicio de la política antirreligiosa, 1792: la Revolución declara la guerra a Europa; el afán de emulación de las facciones revolucionarias; el Terror a la orden del día; regenerar la humanidad: un proyecto totalitario.
9. La Comuna de 1871: derecho al voto o barricadas; 1870: guerra y paz, la Comuna: los fanáticos en el poder.
10. Católicos y obreros: la revuelta de los tejedores: una leyenda por revisar; el sindicalismo sin la Revolución; cuando Francia descubre la miseria obrera; el mito de la colusión entre Iglesia y burguesía; la caridad: un paso necesario, pero no suficiente; León XIII, abogado de los obreros; la obra legislativa de los católicos sociales.
11. La abolición de la esclavitud: la trata de negros: una empresa europea; abolir la esclavitud: de la Restauración a la II República; la esclavitud: una tradición africana y musulmana.
12. El pacifismo en el periodo de entreguerras: una serie de retrocesos frente a Alemania, una izquierda mayoritariamente pacifista; una derecha mayoritariamente antialemana; 1938: derechas e izquierdas, todas muniquesas.
13. Fascismo y antifascismo: 6 de febrero de 1934, crisis de la República; fascismo, nazismo, franquismo: fenómenos heterogéneos; el mito del fascismo francés; antisemitismo y xenofobia: también en la izquierda, el antifascismo, operación de propaganda comunista; 1939: la alianza Hitler-Stalin.
14. Resistencia y colaboración: el traumatismo de la derrota; Vichy no es un bloque; la tragedia judía: ¿quién es responsable?; De Gaulle: de la revuelta a la victoria; contra los alemanes: hombres de todos los bandos; verdades y leyendas de la Resistencia; resistentes de derechas y colaboradores de izquierdas.
15. El asunto Pío XII: el cardenal Eugenio Pacelli, un prelado antinazi; para Pío XII, Hitler es más peligroso que Stalin; decenas de miles de judíos salvados por Pío XII; la campaña contra Pío XII: una acusación póstuma.
16. La descolonización: la colonización, una idea republicana; el pillaje de las colonias por Francia: un mito.
Bienvenida la editorial Ciudadela Libros; y bienvenido a la escena cultural española, de su mano, Jean Sévillia.
Dirección electrónica de interés:
Arbil, anotaciones de pensamiento y crítica, Nº 104, abril de 2006
0 comentarios