Blogia
Crónicas navarras de Fernando José Vaquero Oroquieta

101 años de Acción Social Católica de Zaragoza.

La dilatada historia del catolicismo social de Zaragoza está atravesada por las vicisitudes de una arraigada entidad local: la Acción Social Católica. Con 101 años de vida a sus espaldas, sus actividades se prolongan hasta hoy mismo contemplando interesantes proyectos.

El catolicismo social español y Zaragoza.

La historia del extraordinario movimiento desarrollado por el catolicismo social español se remite, generalmente, a Navarra, País Vasco, Madrid, Levante... No obstante, también Zaragoza fue plaza fuerte de esta renovada presencia social católica, particularmente a lo largo de las dos primeras décadas del pasado siglo XX. Esta circunstancia histórica, generalmente un tanto desapercibida, sería inconcebible sin la vida desplegada por una entidad local que se ha mantenido con continuidad hasta hoy mismo: Acción Social Católica, que en el pasado año 2003 celebró, ya, su centenario.

Acción Social Católica (ASC en lo sucesivo) ha atravesado diversas etapas. La primera de ellas, que se sucede a su fundación, fue la más vital y creativa. Los últimos años del siglo XIX, y los primeros del siguiente, fueron testigos de una revitalización del catolicismo español, en sintonía con las orientaciones dimanadas desde la novedosa Doctrina Social de la Iglesia, empeñado en una labor de articulación social mediante iniciativas de todo tipo. También contempló, y de forma muy consciente y decidida, la acción política directa, promoviendo durante aquellos años la “unión de las derechas”.

A raíz de los Congresos Católicos Nacionales de Burgos (1899) y el de Santiago (1902), nace la Liga Católica; una nueva modalidad de apostolado seglar con vocación política y social. Esta entidad prenderá, inicialmente, en Sevilla, Valencia y Pamplona, ya en 1901. Es en mayo de 1903 cuando se oficializa su constitución en Zaragoza, adoptando enseguida la actual denominación de ASC.

En una Zaragoza en rápido crecimiento industrial, motor y foco de atracción de todo Aragón, y plaza fuerte del hispano anarcosindicalismo que el día 4 de junio de 1923 asesinará al Cardenal Soldevila, ASC desarrollará una vasta actividad social. Mencionemos sus obras, sin ser exhaustivos: el Secretariado Popular, la Obra de la Blusa, la Caja Obrera de la Inmaculada Concepción (de 1905, la actual CAI), la Cooperativa Obrera de Consumo San José, el Sindicato Agrícola de Aragón, el periódico La Acción Social, la Cooperativa de Casas Baratas San Antonio, la Sociedad de Socorros Mutuos para Obreras, la Escuela de Niños, el Economato, los Círculos de Estudios, el Centro de Patronos y Obreros, el Bazar del Hogar Modesto, las Escuelas Nocturnas Obreras, la Biblioteca Popular Ambulante, el Salón de Teatro y Proyecciones, la Juventud Social... También presentará batalla en el ruedo político, alcanzando hasta 4 concejalías, en la ciudad de Zaragoza, y un escaño en el Congreso de los Diputados, en Madrid, de 1914 a 1922.

ASC y las principales organizaciones católicas españolas. Su declive.

La Juventud Social promovida por ASC participó en 1918, junto a otros jóvenes procedentes de los Luises jesuitas, en la constitución en Zaragoza del primer núcleo aragonés de la Asociación Católica Nacional de Propagandistas; entidad que desplegó numerosas actividades en la región con continuidad hasta la actualidad.

Es el 7 de julio de 1919 cuando se publicó el manifiesto del llamado Grupo de la Democracia Cristiana, una moderna expresión política del catolicismo social español. En su grupo fundacional encontramos a algunos aragoneses muy amigos de ASC: Severino Aznar, Inocencio Jiménez, José Latre, Salvador Miguijón y Luis Jordana. ASC, en su periódico manifestó, inmediatamente, su simpatía por esta malograda iniciativa.

En 1921 se constituyó en Zaragoza, por su parte, la Federación de Estudiantes Católicos, contribuyendo Juventud social, con medios y personas, a la implantación de esta importante realidad asociativa.

El 15 de diciembre de 1922, de la mano de 200 personalidades del catolicismo social, se funda el efímero Partido Social Popular, que pudo ser la moderna expresión española de la naciente Democracia Cristiana. También encontramos a algunos aragoneses en el grupo fundacional; no obstante, ASC no entra en el mismo.

Por otra parte en España se implanta oficialmente en 1926, impulsada por la Jerarquía, la Acción Católica, como nuevo instrumento oficial para la articulación de los seglares. No obstante, ya en 1919, la Acción Católica de la Mujer inició su andadura en Zaragoza.

La dictadura de Primo de Rivera acarrea la desmovilización social de buena parte del país, lo que también afectó a una ASC que inicia, por esta causa y por los efectos derivados de la implantación de la nueva Acción Católica, un lento declive con el consiguiente freno en sus iniciativas; si bien algunas de ellas se mantendrán de manera más o menos autónoma de su decaída entidad madre.

Esta pérdida de vitalidad e incidencia se acentúan también a lo largo de la República, la Guerra civil y el franquismo.

La reactivación de ASC. Expectativas de futuro.

A partir de 1978 se inicia una lenta reactivación de ASC, cuya principal obra cuajará en un Centro de Estudios Sociales marcado por sus conocidos cursillos anuales de Doctrina Social de la Iglesia y de Pensamiento Cristiano, por los que han pasado un millar de alumnos. En la actualidad ASC desarrolla, además de los citados cursos, otras actividades: algunas ediciones, un proyecto anual de cooperación al desarrollo, cursillos para socios y amigos de la asociación, excursiones, celebraciones litúrgicas (como la que se celebró el pasado 22 de noviembre de 2003 en la Catedral de La Seo, presidida por el Sr. Arzobispo D. Elías Yanes, y con la asistencia de más de 500 personas), cursillos en Huesca en colaboración con los jesuitas... La entidad deposita sus esperanzas y expectativas en el nuevo centro que, al amparo de la Fundación ASC – CAI, abrirá sus puertas próximamente, con la pretensión de ser casa común de diversas iniciativas sociales.

De la mano de su actual presidente, D. José Luis Escolá Autor, una dinámica Junta de Gobierno impulsa estas iniciativas mirando al futuro, fieles a su legado, con el  valor añadido de dos centenares largos de socios motivados, y en estrecha colaboración con la prestigiosa Caja Inmaculada.

Para saber más:
Cien años de “Acción Social Católica” (1903 – 2003).
De José Estarán Molinero.
Zaragoza, ASC, 616 páginas, 2003.

Dirección actual de ASC:
D. Jaime, 33, principal.
50001 – Zaragoza.

Arbil,anotaciones de pensamiento y crítica, Nº 87, noviembre de 2004.

0 comentarios